Vicent Mascarell Tarrazona (PSOE) desempeñará esta legislatura tareas de envergadura, a nivel local y provincial. En «la terreta» como concejal delegado de Turismo, y en la Diputación como encargado del área de Hacienda e Innovación: «Gandia siempre gana si tiene vecinos en espacios de responsabilidad. Estoy para representar y defender los intereses de los ciudadanos de Gandia y La Safor».
¿Qué necesita ahora mismo Gandia de la Diputación?
Ayuda en términos económicos e inversión pública. El plan de ajuste nos obliga a buscar liquidez en otras administraciones. Sin la Diputación de Valencia y sin la Generalitat no se hubiera podido hacer la mitad de las obras que se han hecho en los últimos cuatro años.
Que en España haya todavía un Gobierno en funciones, ¿hace peligrar la flexibilización del plan de ajuste?
Peligra la falta de interlocución y la toma de decisiones, que hace que peligre la posible renovación o renegociación del plan de ajuste. No es bueno que no haya Gobierno, y en términos generales nos perjudica a todos.
¿Por qué la odiosa comparación con Benidorm?
Ni queremos, ni podemos ser Benidorm. No voy a criticar su modelo turístico, que es sin duda, en otros parámetros, un modelo de éxito. Nosotros tenemos que intentar buscar nuestra propia singularidad. Gandia no quiere ni puede ser Benidorm, tenemos nuestras propias singularidades y fortalezas. Creo que nuestra playa es mucho mejor; tenemos un patrimonio cultural que no tiene Benidorm, y tenemos también maravillas medioambientales. Eso nos hace singulares y también complementarnos. Podemos ser un régimen complementario a Benidorm en muchos aspectos.
¿Se está logrando el reto de la desestacionalición?
Es el reto clásico que de forma discreta se va consiguiendo. Este año hemos conseguido que haya un 11% más de visitantes en mayo y un 18% más de visitantes en junio respecto la anterior temporada turística. Eso significa que la pirámide que se concentraba fundamentalmente en los meses de junio y julio se va ensanchando; estamos haciendo una pirámide con una base más amplia.
Somos conscientes de que la temporada fuerte siempre continuará siendo la de verano, pero tenemos que ir consiguiendo que la misma empiece antes y termine más tarde, y eso se consigue con mucha tenacidad, pero buscando la complicidad del sector hostelero, del ocio, y el sector turístico de Gandia. Sin ellos es imposible la desestacionalización. El sector turístico es afortunadamente cada año mejor y más profesional.
¿Qué le falta a la playa de Gandia?
Un gran espacio deportivo de calidad. Es una petición realista, creo que debemos de centrarnos en dos ejes: deportivo y medioambiental, sin abandonar el ocio y la gastronomía. Debemos de complementar nuestra oferta centrada en la playa, potenciar más y poner en valor lo que es la playa de Gandia y crear infraestructuras deportivas que no tenemos actualmente. Hace falta un polideportivo, un pabellón, campos de fútbol, piscinas… un gran espacio deportivo que nos ayude, no solo a complementar nuestra oferta turística y a facilitar el deporte entre los vecinos, sino, además, a permitir que sea un atractivo hacia el deporte.
Este año ha sido imposible la Playa Can, ¿será posible el año que viene?
He estado hablando con el nuevo director de Costas y le he planteado la necesidad de que el Pativel suavice algunos de sus aspectos. Creemos que debería ser compatible tanto para la Playa Can como para el uso de determinados deportes acuáticos. Me ha dicho que lo estudiará y no renunciamos a presentar una iniciativa parlamentaria para que lo haga posible.
Oliva ya lo recurrió…
Oliva lo recurrió por unas cuestiones y nosotros por otras; no son comparables. Al final las normas se hacen con toda la intención, pero también, como son normas, a la hora de aplicarlas debemos de ver la viabilidad y el impacto que generan. Una vez aprobado el Pativel, que creo que es una magnífica idea, compartimos la filosofía en un 99% y ahora tenemos que aterrizarlo a la realidad del municipio. En base a esto, hemos visto que, en algunos aspectos, es incompatible con determinados usos y que creemos que son positivos para la ciudad. En ese sentido, vamos a ver si podemos convencerlos, pero ahí obviamente nos tienen que acompañar los informes técnicos y medioambientales. Si se cumplen esos parámetros, podemos avanzar.
Este verano no habrá grandes conciertos en la Playa.
Ha habido dos circunstancias. Esto es una iniciativa privada con un apoyo puntual, concreto y muy limitado del Ayuntamiento de Gandia. Nosotros no podemos ni queremos gastarnos un millón de euros en conciertos como lo hacía el Partido Popular. Es la iniciativa privada, a cuenta y riesgo, quien plantea este tipo de proyectos, y muchas gracias.
Cuando alguien quiere invertir en una ciudad no se le puede criticar, sino ponerle la alfombra roja. Cuando uno no hace conciertos no es porque no quiera, es porque en parámetros de rentabilidad no sale. El Espai Baladre era una oportunidad para hacer conciertos más económicos, en un formato más realista y que ayudaba a desestacionalizar por hacerlo en el mes de septiembre. Pero hemos visto que no había garantía de que la obra estuviera finalizada y hemos paralizado los conciertos. Ante el riesgo de tenerlos que anular una semana antes creo que ha sido prudente y hay que agradecer hacerlo con el tiempo suficiente.
A partir del próximo verano tenemos un espacio: el Espai Baladre, un elemento dinamizador para la cultura, el turismo de congresos y el ocio de la playa.
Motos de Acciona, bicicletas Bee… ¿Tiene Saforbici los días contados?
El mercado regula muchas veces. Ahora hay sistemas que, gracias a las nuevas tecnologías, permite que sea más cómodo y sin un mantenimiento tan grande. También deberá replantearse el sistema de SaforBici. Es un debate que se puede abrir y que efectivamente ya se estará valorando.