Portavoz del PP en el Ayuntamiento de Gandia. 37 años, soltero y sin hijos “de momento”. Tiene pensado casarse, cree en la familia y su vocación personal es formar una, pero la esclavitud de la política se lo impide: “Sería muy egoísta por mi parte tener hijos y no dedicarles el tiempo que se debe dedicar a un hijo”. Se define políticamente como liberal sin matices: “Algunos se ponen la etiqueta de liberales pero no saben lo que significa”. Lamenta que Diana Morant no le haya recibido todavía en su despacho y, aunque dice que tendría que pensarlo, quiere ser el candidato del PP a la Alcaldía de Gandia en 2019.
Primera parte de la entrevista a Víctor Soler:
¿Cuál es su balance de lo que llevamos de legislatura?
Una legislatura absolutamente fracasada porque el único objetivo del actual Gobierno local, y especialmente de la Alcaldesa, era tirar al Partido Popular de la institución y una vez conseguido eso no tenían otro programa ni proyecto definido para la ciudad. La prueba es que tres años después lo poco que han llevado a cabo ha sido en perjuicio de los ciudadanos: se ha producido un aumento brutal de los impuestos, se han degradado los servicios básicos especialmente la limpieza y han vuelto a distinguir entre barrios de primera, segunda y tercera. Esperemos que pase pronto este año para que la ciudadanía vuelva a hablar y estoy seguro que nos volverá a dar una oportunidad de Gobierno.
¿Y qué balance hace de la oposición que está ejerciendo el PP?
El PP está haciendo una oposición muy responsable en circunstancias muy complicadas, pero la ciudadanía es inteligente y en Gandia sabe diferenciar el trabajo de unas personas, de un proyecto colectivo como es el PP de Gandia, que gobernó la legislatura pasada en circunstancias muy difíciles y ganamos las últimas elecciones quedándonos a escasos votos de revalidar la mayoría absoluta. Ahora estamos en la oposición trabajando con la fuerza y la responsabilidad que la propia ciudadanía nos ha otorgado.
Nos hemos centrado en denunciar cuando tocaba denunciar, en ser duros cuando tocaba ser duros, y en proponer muchísimas cosas que no han sido escuchadas ni por parte del Gobierno ni por parte de Diana Morant. Es triste comprobar cómo medidas y proyectos que no tienen sello ideológico que hemos propuesto nosotros han sido desechadas continuamente. Demuestra la escasa talla política que tiene este Gobierno y la Alcaldesa.
¿Creyó el PP en algún momento que Ciudadanos podría presentar una moción de censura?
Yo nunca he creído en esa moción de censura porque todo surge de un pacto oculto en un despacho el día antes de las elecciones. Cuando algo se amaña de espaldas a la gente es que hay algo inexplicable que a día de hoy aún no sabemos y romperlo es muy difícil. El pacto no respondió a un interés democrático, sino a un interés de odio y de rencor para tirar a Arturo Torró y el PP como fuera. Ciro Palmer no es más que una marioneta en manos de quien de verdad manda en Valencia que ha estado en la sombra de toda esta operación que ha sido José Manuel Orengo, el verdadero artífice de ese pacto. Un partido que se dice de centro, regeneracionista y en contra de los nacionalismos está dando el Gobierno a Esquerra Republicana en Gandia.
¿Por qué se ha judicializado tanto la política?
Judicializar la vida política es constatar el fracaso de los políticos que son incapaces de resolver por cauces políticos cuestiones de la gestión ordinaria, en este caso de un ayuntamiento. Todos los partidos nos hemos equivocado a la hora de judicializar la vida política. Yo he lanzado muchas propuestas en privado y en público para que eso parara y que todo volviera a la senda de la cordialidad y el respeto entre partidos y tener algo que es básico y que en Gandia no se produce: normalidad en las relaciones personales entre los concejales. Cuando los concejales de distintos partidos no se hablan difícilmente se va a poder llegar a pactos y consensuar cosas que pueden ser buenas para la ciudad. El PP y yo mismo hemos puesto mucho de nuestra parte para que eso se produjera y la respuesta siempre ha sido la misma especialmente por parte del PSOE: a cada intento de darnos la mano, lanzarnos al juzgado por cuestiones que son absolutamente falsas que intentan dañar nuestro honor y reputación. A pesar del sufrimiento político y personas que eso nos causa a nosotros y nuestras familias vamos viendo que eso se va cayendo, pero están utilizando los recursos de todos los vecinos para cuestiones de odio personal, de revanchismo y venganza que está injustificado, demuestra la catadura moral de algunas personas que hacen uso de la institución para hacer sus duelos al sol como en el antiguo oeste.
¿Tan malas son esas relaciones personales entre concejales?
Es incomprensible que la alcaldesa de Gandia independientemente de la relación personal que tenga con el líder de la oposición, o con el portavoz de la oposición del grupo mayoritario no se haya reunido ni una sola vez en tres años para tratar cualquier tema de ciudad. Yo el despacho de Alcaldía con la señora Diana Morant no lo conozco. No he tenido ninguna reunión con ella y le he insistido varias veces que sería bueno que la Alcaldesa de Gandia y el portavoz de la oposición se sentaran en una mesa para hablar de temas de ciudad porque estoy seguro que puedo pactar muchísimas cosas con la señora Diana Morant. En lugar de apoyarse en grupos más radicales como Mes Gandia pueda hacerlo en los 12 concejales del PP. Pero cuando quitando del hola y adiós por educación no ha tenido la deferencia de recibirme difícilmente vamos a cerrar pactos. Si ese es el ejemplo que da la Alcaldesa, imaginaros el resto de concejales. Si yo fuera Alcalde de Gandia, independientemente de la consideración personal que tenga de Diana Morant en caso de ser ésta portavoz de la oposición, la llevaría a mi despacho para hablar de cualquier tema e intentaría pactar cosas con ella. Es la diferencia entre alguien que cree en un liderazgo de ciudad y que sabe que es el representante se todos los ciudadanos, que alguien que ejerce más de Secretaria General del PSOE que de Alcaldesa de todos.
¿Quiere ser el candidato del PP en 2019?
A día de hoy estoy muy ocupado con las dos responsabilidades que tengo, en Gandia como portavoz del PP en el Grupo Municipal y en Las Cortes como diputado autonómico, pienso en el día a día, pero a cualquier persona a la que le apasione la política como a mi y quiera a Gandia como yo quiero a Gandia es un cargo que a todos nos gustaría ocupar y representar, pero no obstante es una cuestión que el partido decidirá en su momento y que yo también tendré que decidir con mis compañeros y mi familia. Es verdad que me lo preguntan y es normal, porque la gente quiere saber quién es el candidato del PP porque sabe que va a ser el próximo Alcalde de Gandia.
Nuestro Comité Electoral Regional propondrá el candidato a la Alcaldía como ha pasado siempre. En principio será después del verano. Lo bueno que tenemos es que durante tres años hemos tenido un esquema de trabajo y un proyecto muy sólido y no tenemos que echar nuestra suerte a un cabeza de cartel. Hay equipo y hay proyecto y eso es lo más difícil de conseguir. Quien encabece esa candidatura contará con el apoyo del partido y tendrá detrás todo el trabajo que hemos hecho estos años en la oposición.
Las encuestas a nivel nacional reflejan una fuerte caída del PP, ¿temen que se extrapole al ámbito local?
Nosotros a nivel local no tenemos encuestas. La encuesta es la sensación de la calle, y la sensación que nos da la calle es consecuencia del último resultado electoral. Si nosotros sacamos 12 concejales y se formó un frente popular para sumar todo contra nosotros, a la ciudadanía no le gustó. Tenemos la Alcaldesa con el menor respaldo electoral que ha tenido nunca ningún candidato del PSOE y aun así es Alcaldesa.
Las encuestas hay que tenerlas como una herramienta más de trabajo pero aún hay mucho indeciso a nivel nacional y hay mucho voto oculto a favor del Partido Popular.