El Museo Faller de Gandia acogió la tarde de este miércoles la tradicional reunión anual de los clientes de Banco Mediolanum, que volvio al formato presencial tras dos años de pandemia.
Familias y sus family bankers se dieron cita en la capital de la Safor para escuchar las intervenciones de Mario Rappanello y Luca Lazzarini, responsables de Tesorería y Comunicación Comercial, respectivamente, de una entidad que cuenta con el mejor índice de satisfacción entre sus clientes según el último informe Stiga, y con la red de asesores financieros más grande de España.
Lazzarini destacó en su intervención la importancia del comportamiento y las emociones a la hora de tomar decisiones económicas, así como la oportunidad que presenta la volatilidad de un mercado “cuyo creiento mundial nunca va a quebrar”.
Rappanello puso en valor, aún en tiempos de incertidumbre, que datos actuales como los de la inflación y el mercado de trabajo, y la bajada de la previsión de la inflación a 5 años por la actuación de los mercados centrales, invitan a mantener el optimismo a futuro.