La Insigne Colegiata de Gandia, como miembro del patronato de la Fundación de la C.V. para la Restauración de la Colegiata, ha solicitado a la Generalitat Valenciana subvenciones por valor de 249.470,79 € destinadas a la conservación y mejora del principal templo de la ciudad, catalogado como Bien de Interés Cultural.
En total, se han presentado cuatro proyectos. El más relevante es la restauración de la fachada norte, que arrastra graves deficiencias tras la intervención realizada hace apenas una década. Las filtraciones, humedades, goteras y desprendimientos de piedra están provocando daños en los retablos de las capillas laterales, además de ensuciar a diario el interior del templo con polvo blanco y fragmentos de piedra. El coste de esta actuación asciende a 288.561,57 €, de los cuales la parroquia solicita a la Generalitat el máximo permitido en la convocatoria: 200.000 €.
El segundo proyecto consiste en la restauración del retablo y la imagen de la Santísima Trinidad, situada junto al Altar Mayor y considerada uno de los altares más importantes de la Colegiata. Su rehabilitación supone una inversión de 19.874,19 €.
La tercera petición corresponde a la redacción de un Plan Director, valorado en 18.150 €, que trace las líneas de futuro de la Colegiata teniendo en cuenta su contexto histórico, patrimonial, cultural y pastoral, pero también su papel como templo vivo con culto diario. Desde la parroquia subrayan que dicho plan debe ser consensuado con el Cabildo Colegial y alejado de “caprichos e intromisiones ideológicas”.
El cuarto proyecto busca mejorar la accesibilidad con la construcción de una rampa definitiva en la Puerta de los Apóstoles, con un coste de 11.446,60 €. Aunque actualmente existe una rampa provisional, la parroquia afirma que no cumple con la normativa vigente y que resulta insuficiente para garantizar la igualdad de acceso a todas las personas, especialmente aquellas con movilidad reducida.
Desde la Colegiata recuerdan que, pese a las reiteradas denuncias sobre la deficiente restauración de la fachada, ha sido tras las obras del campanario cuando se ha abierto la posibilidad real de inversión. En este sentido, destacan la reciente visita de la Directora General de Patrimonio, Marta Alonso, quien dedicó toda una mañana a conocer de primera mano las necesidades del templo.
Finalmente, la parroquia insiste en que la Generalitat aún debe abonar los 150.000 € pendientes de la restauración del campanario, cantidad que permitirá que esta parte del monumento sea visitable. “Nos dicen constantemente que están trabajando en ello. Esperemos que no se cansen de trabajar o finalicen pronto el trabajo, y vengan pronto esos necesarios 150.000 €”, han señalado desde la Colegiata.

