Fomento AIC acogerá este viernes 17 de mayo, a las 22:30 horas, el espectáculo del mentalista Javier Botía. Humor, fenómenos paranormales y una experiencia única es lo que promete el mentalista en Gandia.
En Som Gandia hablamos con Botía y nos sumerge en su trayectoria, desde sus inicios en la televisión hasta convertirse en campeón mundial de mentalismo.
- ¿Cómo comenzó su carrera en el mundo del mentalismo y qué le motivó a seguir adelante en este campo?
Lo cierto es que empecé tarde. Yo era presentador de televisión, o showman que se suele decir –seguramente muchos lectores me recuerdan de cuando tenía un programa en canal nou llamado “números rojos”-, el caso es que a raíz de un episodio de miedo escénico me retiré de la pantalla y me dediqué a otros trabajos.
Un día, se me recomendó como terapia hacer una actividad que me obligue a fijar mi atención en otra cosa que no sea el público para recuperar los escenarios, y el mentalismo resultó ser la solución. Mientras me ocupo de controlar las técnicas de este arte, no tengo opción de pensar en la audiencia y el miedo escénico desaparece.
- ¿Qué le llevó a fusionar el humor con el mentalismo en sus actuaciones?
Era una consecuencia lógica. Si vengo del mundo de la televisión y el stand up comedy, era imposible que no se contaminase mi estilo. Hago mentalismo, pero desde mi faceta televisiva.
- Ganar el primer premio de mentalismo a nivel mundial (FISM 2018) es un gran logro. ¿Qué significó para usted este reconocimiento?
Esta es una competición que se viene realizando desde los años 30, y ni la segunda guerra mundial detuvo su celebración. Reúne a los mejores profesionales de la magia de todo el mundo, en mi caso fuimos 4.000 congregados en Korea. Hasta el día de hoy, nunca un español había conseguido el primer premio de mentalismo. Por supuesto es motivo de orgullo, pero siempre me gusta bromear con que es algo así como ser el campeón del mundo de esgrima, vale, eres campeón del mundo pero no le importa a nadie.
- Como campeón mundial de mentalismo, ¿cuál cree que es la clave para conectar con la audiencia y mantenerlos cautivados durante sus actuaciones?
El mentalismo es la magia más impactante porque rompe el esquema de la lógica. Un mago habla de ilusionismo, sinónimo de ilusión o engaño, también reconoce hacer “trucos”, sinónimo de engaño… Ninguna universidad o gobierno va a destinar recursos en investigar cómo es posible hacer aparecer palomas o desaparecer un coche, en cambio sí lo han hecho para estudiar la telepatía, la hipnosis o el viaje astral. El mentalismo disfruta del beneplácito de la duda, la fascinación de estar frente a un acto genuino.
- ¿Qué encontrarán los asistentes en su espectáculo de Fomento AIC este viernes?
Vamos a brindarles la oportunidad de vivir una experiencia inexplicable en primera persona. Enfrentar la duda sobre los límites de la ciencia y participar de una sesión privada de auténticos fenómenos paranormales… y disfrutarlo con una cena al nivel que ya nos tienen acostumbrados. Todo esto, por supuesto, con humor. Para reír hasta en el más allá.
- ¿Qué aspectos de su actuación considera que han contribuido a su éxito en el mundo del mentalismo?
La combinación del mentalismo, una práctica habitualmente cargada de solemnidad y que no se concibe sin esa atmosfera seria y grave, con el humor propio de los monólogos y el mundo televisivo, es una fórmula original que ha funcionado.
Además, nada puede salir mal, si uno dice ser capaz de ver el futuro en cada espectáculo, tendría delito no triunfar. Es la eterna pregunta: si usted puede saber cual es el número de la lotería, ¿por qué no la gana? Bueno, lo hago.
Este viernes, nos va a tocar a todos. Les espero.