Varios trabajadores de la brigada de limpieza del Ayuntamiento de Gandia han procedido, este viernes 28 de junio, a vaciar un bajo en la calle Sant Enric donde vivía una persona que acumulaba suciedad, trastos y basura desde el año 2014.
Las continuas denuncias vecinales y la labor del policía de barrio han conseguido que, cinco años después, un juez haya autorizado el acceso a este inmueble, tras determinar que su propietario sufría síndrome de Diógenes.
El concejal de Servicios Básicos, Miguel Ángel Picornell, ha señalado que esta desagradable situación se ha prolongado demasiado tiempo pero añade que poco puede hacer la administración local en estos casos, en los que se requiere un informe judicial que permita acceder a la vivienda si no hay permiso del propietario.