El fútbol es uno de los deportes que tiene una capacidad de incidencia social más elevada. Los jugadores son capaces de poner el nombre de una determinada ciudad en el mapa mundial y ese es el caso de Raúl Bravo Sanfélix, nacido en Gandía el 14 de abril de 1981. Este experimentadísimo central pasó por algunos de los mejores clubes de Europa. En este artículo, vamos a repasar la carrera del jugador, realizando una biografía deportiva que analizará los momentos más relevantes de su etapa como futbolista.
De la U.E. Almoines al Real Madrid
La primera aventura como deportista encuentra su origen en el modesto U.E. Almoines, un club humilde que se buscaba la vida en las categorías inferiores de la provincia de Valencia. Su buen desempeño desde una edad temprana -12 años- llamó la atención de algunos de los clubes de la región. En 1996, se incorporó al Gandía, siendo el jugador más joven en anotar nunca en Segunda B hasta ese momento. Su rendimiento sobre el terreno de juego llamó la atención del Real Madrid, que se interesó por él y se hizo con sus servicios en el año 1997. Evidentemente, se incorporó a las categorías inferiores de la entidad blanca.
Para triunfar en el fútbol no hay que tener únicamente talento, sino que el escenario también debe acompañar. En su primer año, se presentaron una serie de lesiones en la zona defensiva que le llevaron a debutar en el primer equipo, siendo esta etapa una de puente entre el conjunto A y el filial. Su debut en partido oficial fue ante el Celta de Vigo, ocupando la zona defensiva junto a Francisco Pavón.
Raúl Bravo también ganó la Liga de Campeones durante su primera etapa en el Real Madrid, el equipo con más títulos en esta competición, por lo que no es de extrañar que se dé como favorito por las casas de apuestas de nuevo este año. Toda la información sobre las apuestas de fútbol la encontrarás en el enlace anterior y allí también podrás comprobar cómo el ex equipo de Raúl Bravo es el segundo, tras el Manchester City, entre los favoritos a ganar otra Champions.
Inglaterra fue el siguiente destino de Bravo, aunque por poco tiempo en su carrera. Eso sí, también alzó la Supercopa de Europa y la Copa Intercontinental antes de irse.
Del Leeds United al regreso al Real Madrid
En la temporada 2002/2003, fue cedido al Leeds United; Vicente del Bosque consideró que su crecimiento como defensa debía ser lejos de Chamartín. Esta odisea extranjera le fue bien, ya que perfeccionó su técnica en un tipo de juego propicio para sus características físicas. Contundencia y solidez gracias a su 1,81m. de altura.
Cuando acabo su aventura en Inglaterra, regresó al Madrid, reconvirtiendo su posición en la de defensa central. Dejó la banda para ocupar el centro del eje, consolidándose como titular y siendo convocado con España para disputar la Eurocopa del año 2004. Un regalo al trabajo bien hecho, del que Bravo es claro estandarte.
Otros clubes, el retiro y palmarés
Tras cumplir un total de seis temporadas en el club de su vida, llegó el momento de decir adiós. El Olimpiacos de Grecia hizo oficial su incorporación en el año 2007, disputando dos temporadas en el Pireo. Tras dos años, volvió a España para jugar una temporada como cedido en el Numancia antes de regresar a tierras griegas. Posteriormente, protagonizó otras incursiones en el fútbol profesional, vistiendo los colores del Rayo Vallecano, el Beerschot belga y el Córdoba.
Sus últimos coletazos como profesional fueron en el Veria FC ay el Aris Salónica. Además, el jugador que dejó Gandía para triunfar regresó a tierras valencianas en el año 2017, con una Champions League, una Supercopa de Europa, una Copa Intercontinental y muchísimos títulos nacionales en su mochila. Era el momento de disfrutar del fútbol modesto en los campos que lo habían visto crecer.