Las obras de la línea de alta tensión comienzan con un nuevo tramo que afectará a parte de la avenida Blasco Ibáñez. Hasta el próximo mes de enero las obras afectarán a los vehículos procedentes de la entrada norte de la carretera de València, así como a la República Argentina o calle Mondúver.
Se trata de una actuación muy demandada por el tejido empresarial de toda la comarca de la Safor. Esta actuación tendrá un impacto económico de 30 millones de euros por parte de Red Eléctrica de España e Iberdrola.
José Manuel Prieto, alcalde de Gandia, ha querido pedir disculpas a toda la ciudadanía por los problemas de circulación que puedan ocasionar estas obras pero ha destacado que se trata de «una demanda histórica de la ciudad y de todo el tejido económico para desarrollar el Sanxo Llop como espacio estratégico de inversiones».
Toda esta nueva red llevará energía hasta el actual polígono Sanxo Llop creando «una infraestructura muy importante, no solo para Gandia, sino para toda la comarca» ha afirmado Empar Martínez, directora general de Industria, Energía y Minas de la Generalitat Valenciana.
Al igual que con el puente de avenida de Alicante, el consistorio ha propuesto una serie de alternativas para el tráfico de la ciudad. Para facilitar la circulación, una de las recomendaciones es utilizar la ronda perimetral de Gandia.
Las obras contarán continuamente con carteles para señalizar todos los cambios en las carreteras y presencia de la Policía Local fija en la zona de la intervención que más problemas pueda causar como: plaza Joaquin Ballester, rotonda de las calles Perú-Benissuai y la zona del parque Joan Fuster.
Por su parte, el vicealcalde y regidor de Urbanismo, Josep Alandete, ha añadido que «esta infraestructura servirá para ponernos al día en la competitividad, porque nuestro tejido productivo y empresarial sea receptivo a las nuevas empresas que puedan aportar ocupación de calidad que necesitamos todos».
