La Comisión de Territorio y Urbanismo aprobó, por unanimidad, la nueva Ordenanza reguladora del control de residuos de la construcción y la demolición el 10 de febrero. Así, entrará en vigor a los 15 días de su publicación en el BOP. El objetivo de la ordenanza es mejorar, regular y evitar que se depositen residuos en zonas no permitidas. Además de gestionar los residuos en beneficio de la conservación del entorno y territorio.
Actualmente, los residuos de la construcción y demolición (RCD) no reutilizados en obras son abocados a vertederos autorizados de residuos inertes, cuando no ilegales. De esta manera, una gestión inadecuada de los RCD genera impactos nocivos sobre el medio ambiente y el medio socioeconómico.
¿A qué afecta la ordenanza?
La ordenanza complementa la obligatoriedad introducida por Urbanismo en mayo de 2020 del uso de áridos reciclados en las obras municipales. De hecho, ya se ha aplicado en todos los documentos de condiciones del Plan Edificant y en obras mayores desde el departamento de Urbanismo. En estas últimas se exige un estudio de residuos y una declaración responsable del uso adecuado.
Esto se debe a que, con la utilización de áridos reciclados, se garantiza la sostenibilidad de edificios e infraestructuras. Asimismo, se promueve la economía circular, se reduce el impacto ambiental de las excavaciones y se dispone de material para restauraciones de espacios degradados. Además, los áridos ya utilizados podrán reciclarse en la construcción donde se generen o irán a una planta de valoración para ser reutilizados.
La ordenanza incluye también un punto específico en cuanto a las infracciones por vertido ilegal. Estas variarán en función de la cantidad y el lugar donde se depositen irregularmente (suelo urbano, protegido, etc.).
El vicealcalde y concejal delegado de Urbanismo, Josep Alandete: “Esta ordenanza es importante, porque incide directamente en las políticas municipales de lucha contra el cambio climático, contra la degradación de nuestro medio natural y sobre la salud de la ciudadanía. Por lo tanto, no es una ordenanza más, sino que es un hito importante, pionera en el territorio valenciano y que muchos Ayuntamientos irán incorporando”.
Las obras y reformas en las viviendas están cada vez más de moda. A medida que las ciudades crecen, los edificios del centro se hacen más viejos y es por eso que no se puede construir obra nueva. Así pues, las reformas en viviendas y pisos en el centro son un recurso que muchos utilizan para estrenar nueva casa. Hoy en día, se calcula que más de el 50% de las viviendas tienen un dispositivo inteligente tipo Alexa, la domótica cada vez más presente, ahora con persianas conectadas, luces conectadas, electrodomésticos e incluso la calefacción y el aire acondicionado. Por ejemplo, una nueva instalación de suelo radiante también se puede conectar a tu dispositivo móvil y poder controlar la temperatura de tu hogar desde cualquier parte del mundo.