Este fin de semana, Gandia ha sido el escenario de las I Jornadas del Gobierno del Cambio, un evento en el que el gobierno de la Generalitat Valenciana ha debatido y hecho balance de este primer año gobernando.
En este contexto, Som Gandia habla con Víctor Soler, portavoz -de nuevo- del Grupo Municipal del Partido Popular de Gandia y Secretario Primera de la Mesa de Les Corts Valencianes.
Soler se muestra crítico con la gestión socialista de los últimos 40 años y presenta una serie de proyectos que, según él, son clave para reactivar una ciudad que, asegura, «se va apagando». Con el respaldo del gobierno autonómico, Soler reafirma su compromiso de trabajar desde la sombra para que Gandia recupere su competitividad y ambición.
- Prieto le ha dado la reunión que solicitó. ¿Qué propuestas le ha presentado?
Primero debo decir que salí de la reunión un poco preocupado porque me pareció que era más de lo mismo. Gandia es una ciudad que lleva 40 años bajo un régimen socialista, y más de lo mismo significa que Gandia poco a poco se va apagando. Eso me preocupa mucho porque no hay un proyecto que realmente reactive la ciudad, algo que creo debería ser nuestra principal ocupación en estos momentos.
Mi papel como oposición no solo es denunciar, sino también proponer. Le presenté una batería de propuestas al alcalde. Estos son proyectos que, sin duda, van a reactivar Gandia, que es nuestro principal objetivo. Aunque vendrán más propuestas, en esta primera reunión no se trataba de presentar un programa de gobierno completo.
De los proyectos que propuse, me gustaría destacar uno en particular: la creación de un campus universitario en el corazón de Gandia. Es un proyecto que aprovecharía el edificio de Correos, que es de propiedad pública, además de otros edificios infrautilizados que también son de titularidad pública. Esto permitiría que una gran universidad estableciera grados universitarios aquí, con el objetivo de atraer a más de 2000 jóvenes al centro histórico de Gandia todos los días. Esto no solo revitalizaría el centro histórico y el comercio, sino que también generaría una infraestructura que actúe como un motor económico en la ciudad.
He ofrecido mi colaboración al alcalde para poner en marcha este proyecto, porque lo que quiero es que Gandia funcione, no colgarme medallas. Los proyectos que propone el actual gobierno son siempre los mismos, parecen un déjà vu, cambiando solo las fechas. Con esos proyectos, Gandia no va a ninguna parte. Creemos que con nuestras propuestas, como este campus universitario, vamos a activar la ciudad.
- En sus dos etapas como portavoz, se nota un cambio importante. Antes el PP de Gandia no tenía el respaldo de un gobierno en la Generalitat, pero ahora sí. ¿En qué cambia eso la forma de hacer oposición?
Cambia mucho porque ahora la Comunidad Valenciana y la Diputación de Valencia están en marcha, y nos falta poner en marcha Gandia. Tenemos dos gobiernos que son conscientes de las necesidades de nuestra ciudad. Uno de mis objetivos con el alcalde socialista es convertirme en el enlace que Gandia necesita para conseguir todo lo que precise. Estoy dispuesto a trabajar desde la sombra, sin buscar protagonismo, para traer cosas para Gandia, y ese también será mi papel en Valencia.
Como secretario de la mesa de las Cortes y diputado autonómico, voy a dedicar todas mis horas de trabajo, ya sea en Valencia o en Gandia, a trabajar por la ciudad. Cuando estoy en las Cortes, estoy trabajando por Gandia; cuando hablo con conselleras, secretarios autonómicos o directores generales, estoy trabajando por Gandia; cuando hablo con el presidente Mazón, estoy pidiendo cosas para Gandia. Le he ofrecido al alcalde mi ayuda en cualquier asunto donde pueda haber un bloqueo, para facilitar el diálogo y avanzar.
Hay una absoluta predisposición, por parte del presidente Mazón, para invertir en Gandia y generar proyectos que la ciudad necesita. Estos proyectos están alineados con lo que ofrece el Partido Popular de Gandia.
- Además de esos grandes proyectos que le presentó a Prieto, ¿cuáles son los retos más urgentes que enfrenta Gandia?
Gandia necesita activarse urgentemente. Nos estamos quedando atrás en muchos sentidos. Hemos dejado de ser competitivos, no solo en el ámbito turístico, sino también en el comercial e industrial. Es inconcebible que Gandia no tenga un acceso directo a la autopista, mientras que Oliva, una localidad de nuestra comarca, tiene dos. Esto afecta nuestra competitividad en múltiples niveles. Es responsabilidad de los 40 años de gobierno socialista.
Es urgente que consigamos proyectos e infraestructuras que nos devuelvan esa competitividad. No puede ser que nuestra playa solo funcione durante el verano, que el comercio tenga cada vez más locales cerrados, o que nos haya llevado más de 16 años poner en marcha un polígono industrial. Necesitamos una hoja de ruta clara para la ciudad, y nosotros la tenemos. Lamentablemente, el actual gobierno está frenado por Compromís, que es reacio al progreso.
Pongo dos ejemplos: tenemos un pequeño glamping cuando podríamos haber tenido un gran proyecto turístico, y la CV-60, que ha estado paralizada por parte del gobierno del Botànic, específicamente por Compromís. El Partido Popular no puede tolerar esto, y habríamos agilizado esas dos infraestructuras porque son necesarias.
- Otra de las propuestas fue la piscina para perros, ¿puedes desarrollar un poco cómo sería?
Es un proyecto complementario a la Playa Can que en su momento puso en marcha un gobierno del Partido Popular, y que luego fue eliminado por el actual alcalde socialista. Mi compromiso es que cuando el Partido Popular vuelva a gobernar, Gandia volverá a tener una Playa Can, y sabemos cómo hacerlo. Pero mientras eso sucede, creemos que puede haber proyectos complementarios que también beneficien a los dueños de mascotas y a la ciudad desde un punto de vista turístico.
La idea es ubicar una gran piscina acuática para perros en el parque de depósitos Clot de la Mota, en una gran área recreativa para perros. Esto no solo beneficiará a los dueños de mascotas de Gandia, sino que también atraerá a personas de toda la provincia, convirtiéndose en un atractivo turístico más para la ciudad.
Son proyectos complementarios. Uno de los retos que me he planteado es tener ambición para Gandia. Hemos tenido 40 años de nula ambición. Yo quiero una ciudad que lo ambicione todo, que compita con quien sea necesario, que sueñe en grande y que trabaje para conseguirlo. Gandia tiene capacidad para tener tanto una Playa Can como una piscina acuática para perros, y vamos a trabajar para que eso sea una realidad.
- Está hablando de recuperar el ayuntamiento para el partido. ¿Cómo está el músculo del PP y el ánimo a día de hoy?
Estamos activos, en marcha y con ganas de trabajar. Somos la principal fuerza política de Gandia. De las cuatro últimas elecciones celebradas en la ciudad, hemos ganado tres. Es cierto que no logramos el objetivo en las municipales, pero ganamos las generales y las autonómicas. Ahora nuestro reto es convertir ese liderazgo en una mayoría suficiente para gobernar en 2027.
El Partido Popular está unido en torno a una causa común: construir una gran alternativa para Gandia. Nuestro objetivo es sumar a todos esos vecinos que se sienten huérfanos de representación política porque creen que el gobierno actual no da respuesta a sus problemas. Estamos trabajando para que se unan a esta alternativa, que no es partidista, sino de ciudad.
Ya he emplazado a mis concejales y al grupo municipal a salir a la calle, reunirnos con colectivos, asociaciones y clubes deportivos. Nuestro despacho va a ser la calle, y vamos a estar ejerciendo de altavoz de las demandas de los vecinos.
- Sobre un tema concreto, el Club de Fútbol Gandía, que es una entidad privada pero recibe dinero público, ¿crees que el ayuntamiento está gestionando bien lo que está pasando?
Lo primero que quiero decir es que me alegra que el Club de Fútbol Gandia tenga cierta viabilidad de futuro y que se haya salvado la situación. Eso es una gran noticia. Sin embargo, me preocupan algunas informaciones que he escuchado recientemente, donde se dice que el gobierno de la ciudad, concretamente el Partido Socialista, ha presionado a un grupo de empresarios locales para que se retiraran de la opción de salvar la deuda del club. Esto es preocupante porque va en línea con lo que escucho de mucha gente de la sociedad civil, de asociaciones y colectivos, que tienen miedo de hablar porque temen que si critican al gobierno, les retiren subvenciones o ayudas.
Esto es una consecuencia de 40 años de régimen socialista. Estoy contento de que el Gandia tenga una solución a corto plazo, pero me preocupa el excesivo intervencionismo del núcleo duro del Partido Socialista en decidir quién puede o no puede invertir o ayudar al club.
- ¿Cree que la oposición del PP puede mejorar?
Siempre creo que todo se puede mejorar. No solo se trata de mejorar, sino de hacer que nuestra voz se escuche más. Vamos a elevar el tono cuando sea necesario, fiscalizar lo que haya que fiscalizar y denunciar lo que no esté funcionando bien.
Me preocupa tener un alcalde que califica de «ruido» o «lío» lo que en realidad es una sana discrepancia política, algo inherente a la pluralidad de ideas en cualquier democracia. Es lamentable tener un alcalde joven con una concepción tan autoritaria del papel de la oposición.
Esta oposición no está aquí para rendir pleitesía al alcalde o al gobierno socialista. No tenemos miedo. Vamos a ser contundentes cuando sea necesario y a señalar todo lo que no funcione bien en Gandia. Dicho esto, también seremos propositivos, porque somos un partido de gobierno, no solo de crítica.
Nosotros preferimos hacer cosas en lugar de criticar por criticar, por eso he ofrecido proyectos al alcalde para que los lleve a cabo. Sin embargo, criticaremos cuando sea necesario, porque la ciudadanía de Gandia nos ha otorgado ese papel. Es nuestra responsabilidad como representantes señalar lo que no funciona bien.
- Trabaja en Gandia y también en la Generalitat. ¿Cómo ve la relación entre ambos gobiernos?
Veo una relación como debe ser: cordial y de respeto institucional entre administraciones. El gobierno autonómico actual no tiene en cuenta el color político, algo que antes no ocurría. En el pasado, hubo favoritismos evidentes del gobierno del Botanic hacia municipios gobernados por el Partido Socialista, y se castigaba a los del Partido Popular.
Ahora, bajo el liderazgo de Carlos Mazón, el Consell trabaja por las necesidades de los ciudadanos, sin importar el color político. Gandia es la ciudad más importante de la Comunidad Valenciana gobernada por el Partido Socialista, pero eso no influye en las decisiones del Consell, que invierte en lo que es necesario. Como ciudadano, esto me tranquiliza. La relación es la que debe ser: cordial, institucional y de respeto entre ambas administraciones.
- ¿Y cree que esa actitud es recíproca desde Gandia?
Bueno, creo que tenemos un alcalde socialista que es muy exigente con el Consell del Partido Popular, pero que muestra una evidente cobardía cuando se trata de exigir al gobierno central.
Me parece bien que el socialista Prieto exija al Consell lo que considere necesario, pero me gustaría que fuera igual de valiente al exigir a sus compañeros en el gobierno de Pedro Sánchez, incluyendo a la exalcaldesa Diana Morant, que está en el Consejo de Ministros y ha hecho poco por la ciudad.
No entiendo por qué Gandia no avanza más en temas como un plan de ajuste menos lesivo para la ciudad, la reducción de impuestos o un acceso directo a la autopista, que son competencias del gobierno central. Me gustaría ver a un alcalde más valiente exigiendo al gobierno central lo que Gandia necesita. No es momento de agachar la cabeza solo porque los responsables sean del mismo partido.
De mejorar el transporte público nada, pero de habilitar la playa para perros, sí!!! madre mía con estos políticos!! Lo único que falta sería más perros y sus excrementos y ladridos en la playa. (El único lugar a salvo de esta pandemia)