En la iglesia-convento de Sant Roc, conocida como del Beato Andrés Hibernón, se seguirá rindiendo culto a corto y medio plazo. Las tres hermanas franciscanas que cuidan del Beatet se marcharán de Gandia el próximo 13 de enero. Destino, las casas que la orden tiene en l’Alqueria de la Comtessa y Teulada. Serán relevadas por sacerdotes que atenderán a los fieles y realizarán las tareas que hasta ahora han realizado las religiosas. De momento el edificio no acogerá el Museo de la Semana Santa.
El regidor delegado de la Semana Santa en Gandia, Ciro Palmer, ha destacado que el Convento de Sant Roc es una propiedad municipal y que las mojas franciscanas han permanecido en nuestra ciudad desde hace más de un siglo: «Eramos conscientes de la situación desde hace meses y hemos mantenido conversaciones con el Arzobispado para garantizar la continuidad del edifico y de todas las actividades que allí se desarrollan. Se plantearon diversas posibilidades pero el problema radica, sobre todo, en la falta de vocaciones en la orden religiosa”.
Palmer ha anunciado que el consistorio organizará un acto de despedida y agradecimiento de las religiosas y ha insistido en que «el diálogo es constante y está garantizada la continuidad del culto. No habrá ningún problema ni cambios de usos en el edifico, por lo que la ciudadanía no debe preocuparse».