«El objetivo siempre es emocionarme y emocionar”. Marwán está celebra 20 años de carrera musical, un viaje lleno de momentos inolvidables y escenarios que han marcado su vida y que este viernes, 21 de marzo, traerá hasta Gandiautor.
Desde sus dos conciertos en el Wizink Center hasta un Metropolitan de Ciudad de México abarrotado, pasando por la emoción de compartir escenario con gigantes como Sabina, Silvio Rodríguez o Serrat, el cantautor ha construido un camino basado en la autenticidad y la profundidad de sus letras. «Nunca quise hacer hamburguesas musicales», confiesa, reivindicando la importancia de la canción de autor en un mundo que tiende a lo superficial.
Ahora, con una puesta en escena más exuberante y una paleta de géneros más amplia, Marwán sigue buscando conmover y conectar con su público. Y, aunque el futuro le depara un merecido descanso y la grabación de un nuevo disco, su meta sigue siendo la misma: seguir creando canciones que cuenten historias, que toquen el alma y que perduren en el tiempo.
- Celebra 20 años de carrera musical. Mirando hacia atrás, ¿cuáles considera que han sido los hitos más significativos de su carrera musical?
La verdad es que siendo un artista que no soy tremendamente mediático o conocido para la masa, es curioso que haya tenido momentos tan remarcados. Principalmente mis dos actuaciones en el Wizink Center, que para ser cantautor tiene mucho mérito.
También mi concierto en la Fiesta de la Lucha, que es mi barrio, donde vinieron 40.000 personas a verme y fue absolutamente apoteósico. O actuaciones también en el extranjero, como mi actuación en el Metropolitan, con un Metropolitan de Ciudad de México lleno. La vez que toqué en el Luna Park dos días seguidos abriendo los conciertos de Jorge Drexler, también fue increíblemente especial. Y luego pues la primera vez que tuve la oportunidad de estar y cantar con Sabina, Silvio Rodríguez, Serrat, Ana Belén y todos los grandes que fue en 2018.
Yo diría que esos han sido los momentos más significativos, pero bueno, también ha habido otros cuantos, como cuando empezaba mi carrera compuse una canción para Televisión Española para el concurso Palabra por palabra. Ahora el año pasado compuse junto con dos amigos la canción de la serie Sueños de libertad, que es la serie más vista de toda la televisión española que se emite en Antena Tres. Entonces ha habido muchos hitos y muchos momentos especiales.
- Si pudiera hablar con el Marwán que empezaba hace dos décadas, ¿qué consejo le daría?
Le daría las gracias, principalmente por no haber dejado de tener la misma inquietud, de hacer el mismo tipo de canciones, canciones que tuvieran alma, que no fueran nunca hamburguesas musicales, sino que fueran canciones con una gran personalidad, con la letra y las melodías muy cuidadas, siempre tratando de buscar hallazgos poéticos y canciones que nos incumbieran y nos contaran nuestra vida, huyendo siempre de la superficialidad y de hacer algo fácil y barato. Entonces le daría las gracias por eso siempre.
- En estos 20 años, ¿qué ha cambiado en su manera de componer y de entender la música?
Evidentemente evoluciona mucho la manera de componer, porque también evoluciona uno como persona y vas descubriendo nueva música, nuevas influencias, vas leyendo cada vez más, vas escuchando canciones de otros de las que aprendes, vas tocando cada vez mejor, vas cantando cada vez mejor, vas viendo que tienen más registros, entonces cambian mucho.
Yo creo que antes era un tipo más acústico, ahora mis canciones se ven mejor con banda, creo que he tocado muchos más palos. Al principio, cuando empezaba mi carrera no indagaba en muchos otros géneros, porque la canción de autor más que ser un género, para mí es una forma de cuidar las canciones y te permite indagar o ir tomando cosas de muchos géneros musicales. Y en ese sentido, en mi último disco, en el viejo boxeador, pues hay swing, hay country, hay chacareras, hay como muchos géneros, a otros muchos géneros que tenía antes. Y creo que en ese sentido mi música ha evolucionado mucho y es mucho más amplia, mucho mejores las letras y mucho más amplia la gama de colores que hay.
- Su música ha sido un vehículo para abordar temas personales y sociales. ¿Hay algún mensaje o reflexión que desee transmitir especialmente en esta gira de aniversario?
Yo creo que el mensaje es el propio concierto. El propio concierto con toda esa paleta de temáticas, con toda esa paleta de géneros y de colores musicales. Creo que esto del mensaje que es mostrar un tipo con muchísimas inquietudes a nivel emocional, a nivel social, a nivel personal, a nivel cultural y luego muchas influencias y muchas inquietudes también a nivel musical, de no quedarme parado en un sitio y no ser el artista que siempre compone la misma canción, sino que tengo una gran paleta y creo que habla por sí solo, yo creo el concierto.
Aparte también la expresión corporal que tengo en el concierto, que es mucho más exuberante que antes y a nivel expresivo está mucho más cerca del rock que de la canción de autor, creo que también es un buen mensaje.
- El formato acústico, como el concierto de Gandiautor, suele ser más íntimo. ¿Qué tiene de especial para usted tocar en este formato?
Sí, suele ser el más íntimo, pero fíjate que a mí no me importa tanto el formato sino la forma de llevarlo a cabo.
Y en ese sentido, aunque sea un formato acústico, la actitud tanto de los músicos como mía es de rock. Lo digo por lo exuberante que es el concierto y por lo rápido que se enciende la gente durante el concierto. Y aunque sea como más íntimo, no tiene tanto que envidiar a nuestros conciertos con bajo, guitarra eléctrica y batería, la verdad.
Para mí la intimidad tiene que ver con una capacidad no tanto de los instrumentos, sino con la capacidad del músico de transmitir y conectar con el corazón del otro y crear momentos íntimos a través de una gran capacidad de conexión.
Entonces, para mí se puede hacer conciertos íntimos incluso con nueve músicos en el escenario, como hice en el Wizink hace dos meses, 9 músicos en el escenario, 6000 personas y aún así resultó íntimo por una forma de conectar con el público.
- ¿Cuál es esa canción que nunca puede faltar en un concierto suyo?
Son unas cuantas, pero si no canto «Un día de estos» la gente me mata, básicamente, porque es la favorita de casi todos, es mi buque insignia.
- Además de la música, ha publicado varios poemarios que han tenido gran acogida. ¿Cómo equilibra su faceta de cantautor con la de poeta?
Bueno, ahora mismo la de poeta la tengo bastante abandonada. Estoy regando únicamente la carrera de cantautor porque es lo que soy en realidad. Digamos que el poeta completaba un poco al cantautor y fue durante una época, pero ahora mismo no tengo tanta inquietud.
Y sigo escribiendo poemas pero no tengo tanta inquietud por publicarlos, la verdad. Entonces ahora mismo estoy centrado en el cantautor. Soy un músico que a veces escribe poemas, eso me considero.
- En un mundo dominado por lo digital y los ritmos urbanos, ¿cómo ve el papel de la canción de autor hoy en día?
Pues posiblemente la veo más necesaria que nunca, porque en un mundo donde predominan las hamburguesas musicales, como he dicho antes, y donde predomina la superficialidad y donde las letras son el último apestado del pueblo, que siga habiendo cantautores que nos cuenten nuestra vida, que nos cuenten nuestras historias más íntimas y que la hagan de un modo bello, me parece más necesario que nunca.
Sobre todo en este mundo en el que vivimos como muy anestesiados y parece que no hay tantos problemas sociales porque ya no hay tantos movimientos sociales o tanta protesta social, más que en las redes sociales, pero ya no se sale tanto a manifestar uno a pesar de los atropellos que los políticos cometen contra la ciudadanía, de los recortes en sanidad, de los recortes en educación, de muchas leyes injustas. Se protesta poco y yo creo que la canción de autor es de las pocas facetas que deja un verdadero testimonio de lo que está sucediendo en estos tiempos y de algunas luchas que son muy necesarias.

- Después de esta gira, ¿qué viene para Marwán?
Un descansito y la grabación del nuevo disco en realidad, que ya estoy comenzando con ello
- ¿Qué le queda por cumplir a Marwán en la música y en la vida?
Uff, me queda muchísimo. Me queda para empezar seguir viviendo de esto toda mi vida y espero cantar hasta los 70, 70 y pico años. Seguir disfrutando de ello y seguir haciendo discos que me conmuevan y que conmuevan a la gente y tener cada vez más llegada y más alcance y más público y más amor en mi vida y más disfrute. Ese es el objetivo siempre emocionarme y emocionar.