El Partido Popular de Gandia, coincidiendo con el primer aniversario de la legislatura, ha realizado su balance enumerando las, a su juicio, «acuerdos incumplidos del Pacto del Serpis», entre los que destacan la bajada de impuestos, la renegociación del Plan de Ajuste, la generación de economía para activar Gandia y la mejora de la conexión Gandia-Grau.
El Portavoz del Grupo Municipal del PP, Víctor Soler, ha afirmado que «en el Pacte del Serpis se repartieron sillones y cargos, y se produjeron divisiones artificiales, como la de Cultura y Escena Urbana, para hacer los mismo o menos y elevar el gasto en un millón de euros» y ha acusado al vice-alcalde, Josep Alandete (Compromís Més Gandia Unida) de «ejercer de tal en la tarjetas de visita, pues la ciudad sigue con una deuda de más de 270 millones de euros y con más paro».
Soler ha abogado por «retomar proyectos de ciudad, como el Centro de desarrollo Agrícola y diseñar infraestructuras turísticas y acabar el auditorio Baladre» para «volver a la ambición que tenía Gandia hace 40 años que fue capaz de proyectar el Puerto de Gandia, el Club Náutico, el Hotel Bayren o el Club de Tenis, una Gandia de emprendedores donde se combina la inversión privada y la pública y no la de 36 años de socialismo que nos ha llevado al deterioro de todo lo planificado y a cero proyectos de futuro».