Los hechos ocurrieron sobre las cuatro de la madrugada a la salida de un local de ocio en la localidad valenciana de Gandia, cuando los agentes tuvieron conocimiento que se estaba produciendo una reyerta entre una multitud de personas.
Rápidamente los agentes se dirigieron al lugar y observaron a dos jóvenes que se encontraban en el suelo siendo agredidos por varias personas. Al percatarse de la agresión, los policías separaron a las partes involucradas, momento en el que uno de los agresores aprovechó para forcejear con ellos mientras les profería amenazas de muerte.
Durante el forcejeo, el hombre hizo caso omiso a las indicaciones de los agentes de que cesara la agresión, propinándole a dos de los policías varias patadas, por la que resultaron lesionados. Tras conseguir reducirlo, fue detenido como presunto autor de un delito de riña tumultuaria y atentado a agente de la autoridad.
Además, los policías observaron en el lugar de la reyerta multitud de cristales rotos junto a las dos personas heridas, uno de ellos presentaba varios golpes en el cuerpo y otro una herida sangrante en la ceja que al parecer el detenido le habría realizado con una botella de cristal. Los agentes solicitaron la presencia de un indicativo sanitario para que asistiesen a los heridos que posteriormente fueron trasladados al hospital.
En el transcurso de las pesquisas, los policías averiguaron que la reyerta se habría iniciado en el interior de un establecimiento de restauración en el que presuntamente varias personas se habrían lanzado vasos y botellas de cristal. Tras salir del local para intentar protegerse, tres de los participantes habrían comenzado a golpearles.
Después de finalizar las averiguaciones pertinentes, los agentes han detenido a tres de los participantes como presuntos autores de un delito de riña tumultuaria, además a uno de ellos se le imputa un delito de atentado a agente de la autoridad. Los tres detenidos, dos con antecedentes policiales, han pasado a disposición judicial.