El recurso municipal de los agentes tutores comenzó a funcionar en Gandia en el año 2022. Una estrategia para prevenir el bullying, que consiste en que un agente de policía formado pueda controlar que no haya incidentes en el entorno escolar. El agente atiende a indicios como el absentismo escolar o las peleas del alumnado para alertar sobre un caso de mala convivencia entre los escolares. Este curso escolar 2023-2024, además, se ha incorporado un segundo profesional a la plantilla con el objetivo de ofrecer un mejor servicio a la comunidad educativa de la ciudad.
Entre otras cosas, ambos controlan que no haya incidentes, tanto a la hora de entrar y salir del centro, como en los momentos de recreo, se reúnen con el profesorado, colaboran con los Servicios Sociales, actúan como mediadores cuando es necesario, e imparten talleres de distintos temas entre los diferentes colegios e institutos locales. Como novedad, se está trabajando en la creación de un aula donde poder atender y reconducir los casos de niños y niñas que faltan a clase de forma habitual.
Desde el inicio del curso escolar, los agentes han realizado un total de 185 actuaciones entre los diferentes colegios, institutos y departamentos, han llevado a cabo 21 controles de absentismo y localizado a 20 menores fuera de sus centros, y han efectuado un total de 16 actuaciones con los Servicios Sociales. Además, actualmente participan en una mediación reglada para un conflicto entre dos menores en el IES Veles i Vents, y han remitido dos informes a las Unidades de Atención a la Familia y la Mujer (UFAM), por sospechar de un posible delito.
La concejala de Educación, Esther Sapena, ha dicho que esta labor “ha mejorado mucho la convivencia y el bienestar de toda la comunidad educativa en particular, pero también de la sociedad gandiense en general”. Además, la regidora delegada de Seguridad, Lydia Morant, ha destacado “la importancia de la prevención y el trabajo diario con las familias, el profesorado y los servicios públicos”, así como lo necesaria que es la información para “evitar conflictos y tratar los valores de convivencia escolar y urbana”.
En cuanto a la importancia de la iniciativa, José Martínez Espasa, el comisario principal de la Policía Local, ha explicado que “esta lacra social tiene unas connotaciones mucho más profundas de lo que pueda parecer”, dado que el alumnado que sufre este problema en cualquiera de sus formas corre un mayor riesgo que el resto de “caer en el fracaso escolar relacionado con la delincuencia”.
