Tras más de 15 años de proyectos, trabajo y burocracia, el Ayuntamiento de Gandia ya es propietario de la Capilla de la Asunción. Se trata de un edificio situado en la calle Confraria junto a la Insigne Colegiata en el que se celebraban las misas y las fiestas la Asunción de la Virgen María de la mano de la Cofradía de Nuestra Señora Santa Maria.
El próximo jueves será el día en el que se firmen las escrituras que garanticen, finalmente, que este edificio sea ya de propiedad del Ayuntamiento de Gandia. «Después de 15 años intentando conseguir que fuera propiedad local, por fin se puede decir que es una realidad y no una utopía. El legado que dejamos a las generaciones posteriores es el cuidado y el respeto por el patrimonio» ha destacado el vicealcalde Josep Alandete.
Este edificio, nombrado como Bien de Relevancia Local por ser un edificio de principios del siglo XIX, es de estilo barroco tardía y está formado por el edificio de la capilla, de 108,41 metros cuadrados, y otro edificio contiguo de 66 metros cuadrados. Con el paso de los años, este edificio se ha ido convirtiendo en un local de almacenamiento para Cáritas y, posteriormente en una tienda, por lo que no conserva el aspecto de Capilla.
El Ayuntamiento pretende recuperar este elemento patrimonial clave como es la Capilla de la Asunción y reformarla por completo poco a poco. La regidora de Patrimonio Histórico, Artístico y Cultural, Alicia Izquierdo, ha afirmado que «en un futuro, querríamos que fuese un edificio vinculado a la ciudad que diera a conocer su historia, pero también un punto de referencia para los peregrinos, ya que se encuentra en una céntrica localización».