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/ 19 marzo 2024

Se hablará en este 2021…

Se hablará en este 2021…

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Cada inicio de año es inevitable que se hagan listas de predicciones o tendencias en todos los sectores de la economía y la empresa.

En el mundo de la tecnología esto todavía tiene más sentido si pensamos en que las innovaciones tecnológicas nos vienen en avalancha y cuando estamos empezando a comprender y disfrutar una tecnología, aparece otra que viene a mejorar, sustituir o complementar la anterior.

Por eso vamos a dar un pequeño repaso a las tecnologías de las que más oiremos hablar este 2021. En la mayoría de caso no son irrupciones novedosas de por sí, sino que será la implantación y el uso general que la convertirán en algo imprescindible.

Cabe decir, también, que ninguna de estas aportaciones tiene su lugar en el mundo asegurado este año. Como bien sabemos el mundo tecnológico es absolutamente volátil y una gran presentación este mes de enero, puede estar en desuso en primavera.

El Internet de las Cosas o de las Casas

Si bien no se trata de una novedad absoluta, si que está previsto que este año el nivel de automatización y sistemas domóticos aumente de forma considerable. Ayudados por el tirón que sistemas como Alexa está suponiendo para los usuarios domésticos, cada vez más hogares tienen algún sistema interconectado: robots de limpieza que se controlan de forma remota a través del móvil, sistemas de iluminación inteligente que responden a las horas de sol, calefacciones que se encienden un tiempo antes de que lleguemos a casa, etc.

Todos estos dispositivos está disponibles ya para el mercado doméstico a costes muy económicos y lo que hace unos meses era cosa de cuatro “frikis” que querían impresionar a sus cuñados, en unos meses será algo tan obvio como puede programar el apagado de un televisor.

Internet as a Service

Si algo nos ha demostrado este 2020 es la capacidad de la mayoría de empresas de transformar sus modos de trabajo e implantar sistemas basados en Internet para poder seguir operando. Bien sea enviado a sus trabajadores a casa o bien desarrollando nuevo servicios para poder seguir atendiendo a los clientes, las empresas han contado más que nunca con soluciones online que van mucho más allá de trabajar en “la nube”.

La capacidad de escalar los servicios y ponerlos a disposición de un número mayor de gente son la base de este Internet as a Service (IaaS). El caso paradigmático de esta pandemia ha sido Zoom. La conocida aplicación de videoconferencia comenzó a ser usada por un número cada vez más grande de usuarios, pero en vez de morir de éxito y limitar sus operaciones, gracias a su infraestructura como servicio, pudo escalar rápidamente sus sistemas y fue capaz de dar respuesta al número cada vez mayor de demanda de conexiones.

Las empresas que estén preparadas para poder desplegar en pocos minutos su estructura por todo Internet para poder ofrecer sus servicios a un número cada vez mayor de usuarios, serán las ganadoras.

Imaginemos una empresa que haya implantado un modelo de trabajo en remoto y donde sus trabajadores utilicen su ordenador para conectar a un escritorio corporativo. Si la empresa que ofrece el servicio de desktop remoto puede aumentar el número de escritorios disponibles en pocos minutos, para atender a una incorporación de personal, habrá hecho que no haya un parón de tiempo muy importante para configurar aplicaciones, accesos, etc., en los dispositivos clientes y por tanto, la empresa gane tiempo y dinero.

Inteligencia Artificial

Al margen de pensamientos apocalípticos sobre el término de Inteligencia Artificial (IA), esta tecnología será una de las que más incremento experimente este año.

La ciencia ficción nos ha mostrado a las inteligencias artificiales como entes que una vez fuera del control de sus creadores, han intentado doblegar a estos imponiendo su gran capacidad de cálculo y velocidad. En realidad el uso de la IA a día de hoy está muy extendido y casi todos somos usuarios de algún sistema inteligente sin que la mayoría de nosotros seamos conscientes.

Cuando preguntamos a Siri o a Google por un restaurante que nos pueda gustar o quede cerca de nuestra ubicación actual, en realidad interactuamos con una IA que conoce nuestros gustos, nuestra situación y nos informa en consecuencia. Cuando vemos coches autónomos o semiautónomos, estamos usando IA’s que interactúan con el entorno para llevamos por la ruta más segura y en las mejores condiciones.

Otro de los usos de las IA más comunes son la recopilación de datos y el aprendizaje sobre ellos. Eso ha servido para que los grandes laboratorios puedan conocer más sobre el COVID y realizar simulaciones y la fabricación de las vacunas que actualmente suministran.

Como vemos el uso de las inteligencias artificiales, no es algo propio de las películas de ciencia ficción sino que están en nuestro día a día.

Seguridad y ciberseguridad

Con el aumento de los teletrabajadores, los servicios online y los dispositivos que gestionan nuestros datos, la ciberseguridad se ha convertido en un requisito imprescindible. Solamente en este pasado 2020, se ha considerado que el número de ataques DDOS (denegación de servicio) a servidores online se ha duplicado, según un informe de la compañía alemana de seguridad Link11.

A margen de las ciberestafas, el phishing y otros riesgos que corren los servicios online y los dispositivos de los usuarios, está claro que el aumento del uso de los sistemas en Internet, hace que estos sean un objetivo muy rentable para los delincuentes especializados.

Realidad aumentada

Otro servicio puramente tecnológico que va a dar mucho que hablar este 2021 es el uso masivo de los servicios de realidad aumentada. Este sistema permite visionar en el mundo real, a través de dispositivos móviles, elementos virtuales que no existen para poder ver cómo interactúan con el entorno.

Imaginemos una tienda física que ofrezca un probador virtual. El cliente ya no tiene que entrar en el con una carga de ropa para probarse, sino que simplemente frente a una pantalla podrá seleccionar los modelos y tallas convenientes y podrá ver en tiempo real como su imagen virtual luce esa camisa o ese abrigo que quiere comprar.

Otro ejemplo más cercano sería el uso de sistemas de navegación que nos permitan además de situarnos en una ubicación determinada, obtener información sobre nuestro entorno. Si estamos visitando un museo, una aplicación de este tipo iría localizando nuestra situación nos informaría en tiempo real de las obras que tenemos justo delante.

Y aún hay más…

Dentro de las tendencias que este 2021 va poner a nuestro alcance están también el lanzamiento definitivo del 5G, la importancia de la sostenibilidad de los recursos que usan las tecnologías, la explosión del comercio online y muchas más.

Sin duda este año va a ser muy interesante seguir qué novedades van apareciendo y sobretodo, ver cuales llegan para quedarse o cuales brillarán un tiempo y desaparecerán. ¿Hacemos apuestas?.

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Cada inicio de año es inevitable que se hagan listas de predicciones o tendencias en todos los sectores de la economía y la empresa.

En el mundo de la tecnología esto todavía tiene más sentido si pensamos en que las innovaciones tecnológicas nos vienen en avalancha y cuando estamos empezando a comprender y disfrutar una tecnología, aparece otra que viene a mejorar, sustituir o complementar la anterior.

Por eso vamos a dar un pequeño repaso a las tecnologías de las que más oiremos hablar este 2021. En la mayoría de caso no son irrupciones novedosas de por sí, sino que será la implantación y el uso general que la convertirán en algo imprescindible.

Cabe decir, también, que ninguna de estas aportaciones tiene su lugar en el mundo asegurado este año. Como bien sabemos el mundo tecnológico es absolutamente volátil y una gran presentación este mes de enero, puede estar en desuso en primavera.

El Internet de las Cosas o de las Casas

Si bien no se trata de una novedad absoluta, si que está previsto que este año el nivel de automatización y sistemas domóticos aumente de forma considerable. Ayudados por el tirón que sistemas como Alexa está suponiendo para los usuarios domésticos, cada vez más hogares tienen algún sistema interconectado: robots de limpieza que se controlan de forma remota a través del móvil, sistemas de iluminación inteligente que responden a las horas de sol, calefacciones que se encienden un tiempo antes de que lleguemos a casa, etc.

Todos estos dispositivos está disponibles ya para el mercado doméstico a costes muy económicos y lo que hace unos meses era cosa de cuatro “frikis” que querían impresionar a sus cuñados, en unos meses será algo tan obvio como puede programar el apagado de un televisor.

Internet as a Service

Si algo nos ha demostrado este 2020 es la capacidad de la mayoría de empresas de transformar sus modos de trabajo e implantar sistemas basados en Internet para poder seguir operando. Bien sea enviado a sus trabajadores a casa o bien desarrollando nuevo servicios para poder seguir atendiendo a los clientes, las empresas han contado más que nunca con soluciones online que van mucho más allá de trabajar en “la nube”.

La capacidad de escalar los servicios y ponerlos a disposición de un número mayor de gente son la base de este Internet as a Service (IaaS). El caso paradigmático de esta pandemia ha sido Zoom. La conocida aplicación de videoconferencia comenzó a ser usada por un número cada vez más grande de usuarios, pero en vez de morir de éxito y limitar sus operaciones, gracias a su infraestructura como servicio, pudo escalar rápidamente sus sistemas y fue capaz de dar respuesta al número cada vez mayor de demanda de conexiones.

Las empresas que estén preparadas para poder desplegar en pocos minutos su estructura por todo Internet para poder ofrecer sus servicios a un número cada vez mayor de usuarios, serán las ganadoras.

Imaginemos una empresa que haya implantado un modelo de trabajo en remoto y donde sus trabajadores utilicen su ordenador para conectar a un escritorio corporativo. Si la empresa que ofrece el servicio de desktop remoto puede aumentar el número de escritorios disponibles en pocos minutos, para atender a una incorporación de personal, habrá hecho que no haya un parón de tiempo muy importante para configurar aplicaciones, accesos, etc., en los dispositivos clientes y por tanto, la empresa gane tiempo y dinero.

Inteligencia Artificial

Al margen de pensamientos apocalípticos sobre el término de Inteligencia Artificial (IA), esta tecnología será una de las que más incremento experimente este año.

La ciencia ficción nos ha mostrado a las inteligencias artificiales como entes que una vez fuera del control de sus creadores, han intentado doblegar a estos imponiendo su gran capacidad de cálculo y velocidad. En realidad el uso de la IA a día de hoy está muy extendido y casi todos somos usuarios de algún sistema inteligente sin que la mayoría de nosotros seamos conscientes.

Cuando preguntamos a Siri o a Google por un restaurante que nos pueda gustar o quede cerca de nuestra ubicación actual, en realidad interactuamos con una IA que conoce nuestros gustos, nuestra situación y nos informa en consecuencia. Cuando vemos coches autónomos o semiautónomos, estamos usando IA’s que interactúan con el entorno para llevamos por la ruta más segura y en las mejores condiciones.

Otro de los usos de las IA más comunes son la recopilación de datos y el aprendizaje sobre ellos. Eso ha servido para que los grandes laboratorios puedan conocer más sobre el COVID y realizar simulaciones y la fabricación de las vacunas que actualmente suministran.

Como vemos el uso de las inteligencias artificiales, no es algo propio de las películas de ciencia ficción sino que están en nuestro día a día.

Seguridad y ciberseguridad

Con el aumento de los teletrabajadores, los servicios online y los dispositivos que gestionan nuestros datos, la ciberseguridad se ha convertido en un requisito imprescindible. Solamente en este pasado 2020, se ha considerado que el número de ataques DDOS (denegación de servicio) a servidores online se ha duplicado, según un informe de la compañía alemana de seguridad Link11.

A margen de las ciberestafas, el phishing y otros riesgos que corren los servicios online y los dispositivos de los usuarios, está claro que el aumento del uso de los sistemas en Internet, hace que estos sean un objetivo muy rentable para los delincuentes especializados.

Realidad aumentada

Otro servicio puramente tecnológico que va a dar mucho que hablar este 2021 es el uso masivo de los servicios de realidad aumentada. Este sistema permite visionar en el mundo real, a través de dispositivos móviles, elementos virtuales que no existen para poder ver cómo interactúan con el entorno.

Imaginemos una tienda física que ofrezca un probador virtual. El cliente ya no tiene que entrar en el con una carga de ropa para probarse, sino que simplemente frente a una pantalla podrá seleccionar los modelos y tallas convenientes y podrá ver en tiempo real como su imagen virtual luce esa camisa o ese abrigo que quiere comprar.

Otro ejemplo más cercano sería el uso de sistemas de navegación que nos permitan además de situarnos en una ubicación determinada, obtener información sobre nuestro entorno. Si estamos visitando un museo, una aplicación de este tipo iría localizando nuestra situación nos informaría en tiempo real de las obras que tenemos justo delante.

Y aún hay más…

Dentro de las tendencias que este 2021 va poner a nuestro alcance están también el lanzamiento definitivo del 5G, la importancia de la sostenibilidad de los recursos que usan las tecnologías, la explosión del comercio online y muchas más.

Sin duda este año va a ser muy interesante seguir qué novedades van apareciendo y sobretodo, ver cuales llegan para quedarse o cuales brillarán un tiempo y desaparecerán. ¿Hacemos apuestas?.

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