Durante los últimos meses, hemos visto cómo muchos de los carriles bici la ciudda de Gandia han quedado obsoletos, dando paso a las vías compartidas de baja velocidad. Sin duda, al igual que ocurre en otras ciudades de España, la idea es pacificar el tráfico de las urbes, proporcionando prioridad y respeto a los peatones.
Aunque no existe un plan en el que se pormenorice parece ser que se continua impulsando esta convivencia en la vía pública y, entre otras cosas, posibilitar su transición a una ciudad cada día más inteligente.
Hace más de dos años, el Pleno del Ajuntament de Gandia aprobó por unanimidad la solicitud de adhesión de la ciudad a la Red Española de Ciudades Inteligentes o RECI.
Algunos de los objetivos más importantes que comparten las ciudades que forman parte de esta red son la movilidad (como en el caso de estas vías compartidas de baja velocidad), el turismo inteligente, los servicios urbanos, la gobernanza, el medio ambiente y, por supuesto, la administración electrónica.
Precisamente, en lo que respecta al mundo digital, y a la aplicación en la administración y en todo tipo de servicios que tienen que ver con la forma en la que el ciudadano se relaciona con la ciudad, las instituciones deberían mirar al sector privado.
Durante los últimos años, hemos vivido una digitalización vertiginosa que ha impactado drásticamente en la manera que tenemos de consumir productos y servicios. Desde música o contenidos audiovisuales a la posibilidad de comprar prácticamente cualquier producto en tan solo unos clics, pasando, por supuesto, por el mundo de los videojuegos o los juegos en general. Un claro ejemplo de cómo se han transformado las industrias lo encontramos en los juegos de casino online. Plataformas como VegasSlotsOnline proporcionan la posibilidad de girar la ruleta, enfrentarte a un crupier de blackjack o jugar a tragaperras gratuitas sin tener que acudir a un casino físico. De hecho, podemos jugar desde prácticamente cualquier lugar: desde el sofá de nuestra casa o la piscina de hotel en el que disfrutamos de nuestras vacaciones, gracias a nuestros dispositivos móviles. Esto ha cambiado totalmente el paradigma del ocio digital y ha convertido a los juegos de casino online en uno de los negocios más rentables del sector.
Algo muy similar ha ocurrido con diversos formatos físicos de contenido audiovisual, como los DVD o los Blu-ray, que han sido sustituidos por plataformas de vídeo bajo demanda, entre las que destaca Netflix. La empresa de Reed Hastings (Cofundador de Netflix) cerró 2021 con unos beneficios netos de nada menos que 2.761 millones de dólares, un 48 % más que en 2020.
Y también podemos constatar el mismo fenómeno en el caso de la música, que ha pasado de venderse a través de formatos físicos como el CD, para luego dar paso a los iPod y a otros dispositivos de almacenaje de archivos mp3, para finalmente desembocar en plataformas como Spotify, líder dentro de las plataformas de música bajo demanda y, junto con YouTube, una de las principales formas que utilizamos para escuchar nuestra música favorita.
En definitiva, estas son iniciativas privadas que marcan un claro camino a la hora de hacer más inteligentes los negocios: trabajar a través de plataformas digitales en lugar de hacerlo a través de establecimientos físicos. Es el camino que las diferentes administraciones, incluida la de Gandia, están tratando de trazar, aunque, por ahora, no esté resultando tan sencillo como en el sector privado, que dispone de recursos y beneficios difícilmente comparales a los de la iniciativa pública.
En cualquier caso, la digitalización del sector público de Gandia lleva casi tres años en funcionamiento y siendo cada día más eficiente, dando solución a las necesidades de los ciudadanos.