Los hechos ocurrieron a mediados de este mes de marzo en Gandia. Al tener conocimiento los agentes que un hombre habría irrumpido en un comercio portando un destornillador que al parecer habría utilizado para amenazar a la vendedora y obligarla a que le entregase toda la recaudación.
El hombre habría accedido al local ataviado con ropa deportiva y una bufanda negra que le cubría el rostro, portando un destornillador que utilizó para amenazar a la dependienta. El varón le habría obligado a que se dirigiese a la caja registradora y le entregase la recaudación, apoderándose del importe que ascendía a 1.046 euros para seguidamente emprender la huida.
Después de realizar las indagaciones policiales los investigadores averiguaron la identidad del sospechoso, estableciendo posteriormente varios dispositivos de vigilancia y seguimiento en torno a su domicilio, que gracias al operativo establecido, los policías lograron detener al sospecho varios días después.
Además, los agentes realizaron un registro en el domicilio del hombre e intervinieron las prendas de ropa que llevaba puesta el día del robo, así como el destornillador que al parecer utilizó para perpetrarlo.
El arrestado que ya cuenta con numerosos antecedentes policiales, ha pasado a disposición judicial.